JUDAS
JUDAS
DR. MAXIMO GRILLO ANNUNZIATA
Antauro fue traicionado en el Andahuaylazo, pero no
fue la única traición que tuvo que soportar en su lucha por la independencia
del Perú y la reivindicación de nuestro pueblo.
Al caer prisionero de los
traidores, por orden del mismo Antauro fui nombrado secretario general nacional
del etnocacerismo. Una de las primeras cosas que hice fue nombrar una dirección
de emergencia y la creación de la secretaria de inteligencia, la cual se encargaría
de recabar toda información relevante para
la organización. Los etnocaceristas teníamos 1000 ojos y 1000 oídos.
Toda información relevante debería
ser transmitida solamente a mí y al secretario de
inteligencia. Prohibí todo uso de los nombres verdaderos en la secretaría y le
di un nombre a cada uno que era cambiado cada tres meses. Prohibí todo registro escrito, nada de cuadernos con direcciones,
nombres y teléfonos, para evitar uno de los errores de Sendero Luminoso, que
cada vez que caía uno de sus militantes, le encontraban libretas llenas de
direcciones nombres y teléfonos.
De esta forma durante el
segundo gobierno del ladrón de Alan García, nos informaron de que un grupo de inversionistas
chilenos le habían entregado una bolsa de dinero a Alan García para asesina a
Antauro.
Se prendieron las alarmas,
de inmediato convoque a los etnocaceristas mas allegados y se les dio a conocer
la situación .Los militantes etnocaceristas
que eran todos reservistas, se enfurecieron.
Se acordó de inmediato la formación
de un comando suicida para liquidar a Alan García si llegaba a realizar se
espantoso crimen. Cuando pedí voluntarios para formar el comando suicida, todos
los presentes se ofrecieron.
Designe a uno de ellos para
que organizara el grupo y paralelamente envié
un tercero y un cuarto emisario a los apristas advirtiéndoles de que si asesinaba Antauro, Alan García pagaría con su vida, que
fuera comprando su ataúd, y que no tendrían forma de evitarlo. García que toda
su vida fue un cobarde además de ladrón, asesino y traidor se dio cuenta de que
los etnocaceristas estaban dispuestos a cumplir con su amenaza y no se atrevió
a realizar el espantoso crimen. Sabía que la amenaza iba en serio.
Pero como era de
esperase tratándose de Alan García,
tampoco les devolvió su dinero a los inversionistas
chilenos, se quedó con todo el billeton.
Siempre un pendejo.
Pero la situación nos alarmo
a tal punto que luego planeamos un rescate de Antauro .Lo sacaríamos a sangre y
fuego y pedí nuevamente voluntarios para el comando de rescate. Todos los
presentes se ofrecieron. Y el comando y la operación los dirigía yo mismo para
lo cual me puse a estudiar como hacerlo.
Pero al mismo tiempo había que
organizar un levantamiento de todos los reservistas en todo el territorio
nacional.
Cuando todo estaba planificado
fui a hablar con Antauro y le expuse la decisión de las bases.
-Bien mayor, ¿incendiamos la
pradera?
La respuesta de Antauro fue
que no era necesario exponer ni sacrificar a los cuadros, porque ya había hecho
los cálculos del caso y había concluido
que Ollanta ganaría las elecciones, tal como luego ocurrió. El análisis de
Antauro fue correcto.
Ollanta se comprometió con
Antauro y con los etnocaceristas en que antes de los 30 días en el gobierno liberaría
a Antauro y comenzaría la gran trasformación.
Abandonamos los planes de rebelión
y pusimos todo nuestro esfuerzo en apoyar la candidatura de Ollanta.
A la semana de ser elegido,
Antauro me mando la orden de “póngase en
contacto con el comandante Ollanta para coordinar los pasos y medidas para la gran
transformación”. Pero Ollanta no contestaba mis llamadas, por lo cual le envié
un emisario. Ollanta le dijo al emisario que no quería saber nada de Antauro ni
de los etnocaceristas y nos fuéramos al carajo.
Para que Ollanta dijera eso
a los 7 días de su elección, quiere decir que tenía pensada su traición desde mucho
antes.
Ollanta traiciono a Antauro,
al etnocacerismo, a la gran transformación, al pueblo que le eligió y a la
patria.
El daño que Ollanta ocasiono
es inconmensurable, enorme, trágico, hizo perder la primera oportunidad que tuvo el Perú en 200
años para lograr su independencia y soberanía,
pudimos cambiar la historia, pudimos hacer una nueva historia. Es un miserable.
Judas vendió a Jesús por 30 monedas
de plata, pero Ollanta traicionó a todos y a todo por millones que ahora se
sabe le dio Odebrecht y el club de la construcción.
Fue un maldito Judas.
Si lo encarcelan y le quitan
todo no sentiré ninguna pena por el y su
comitiva de corruptos, y espero que cuando Antauro tome el pode lo fusile.
Soy político viejo y nunca antes vi tanta lealtad a un lider, como la que le tiene los reservistas
y etnocaceristas en general a Antauro, dispuestos a morir por el hombre que les
asegura el cumplimiento de dignidad que el Perú le debe a su pueblo.
Sea este artículo un
homenaje a todos los mártires y héroes anónimos de etnocacerismo
....ETNOCACERISTAS LEALES SIEMPRE...TRAIDORES NUNCA!
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