LA NASA Y LOS OVNIS
LA NASA Y LOS OVNIS
DR. MAXIMO GRILLO ANNUNZIATA
Recién a estas alturas la NASA decidió tomar posición en
relación a los llamados OVNIS, aceptando que existen pero negando que sean
extraterrestres, además les cambió el nombre, ahora se llaman UAP (Fenomenos
Aereos no Identificados) por sus siglas en ingles.
La gran pregunta es: existe o no lo OVNIS, y supongo muchos tendrán
relatos sobre el tema.
Uno de esos soy yo, sobretodo en relación a dos casos:
Caso 1.-Entre los años de 1964-1965, no recuerdo bien la
fecha, venia viajando en barco desde Valparaíso hasta el Callao, donde me
esperaba mi padre.
En esa época existía
una línea marítima llamada Italmar, cuya representante era la empresa
Reiser-Curioni, y cuya trayectoria era de Valparaíso-Italia, pasando por el
canal de Panamá y cuya sede estaba a
unas dos o tres cuadras del local de congreso.
El viaje de Valparaíso al Callao duraba ente 5-6 días porque
realizaba una parada en Arica.
Mientras me paseaba por todo el barco sin tener nada mas que
hacer, pude observar que dentro del barco había una especie de hotel, por el
cual podías rentar por horas o pocos días un camarote, y es que a bordo
viajaban prostitutas profesionales que se embarcaban en Valparaíso y hacían el papel de damas de compañía con los viajeros que quisieran sus servicios.
Uno de esos días cansado de ver solo agua de mar me fui a dormir una siesta al
camalote, despertándome al cabo de un par de horas.
Al subir a cubierta me encontré con un escandalo: todos
hablaban al mismo tiempo, unos gritaban, otros maldecían, algunas mujeres lloraban y otras estaban en crisis de
pánico.
-¿Que pasa? ¿qué ha
ocurrido? –pregunté lleno de curiosidad.
-Los marcianos, los marcianos, los marcianos
-¿Marcianos?
-Si, platillos voladores, platillos voladores, nos están
invadiendo
En esas épocas no se decía OVNIS, sino platillos voladores.
-¿Platillos voladores? ¿Dónde?
-Por allá se fueron-señalando el horizonte
-¿A donde se fueron? (pregunta más idiota la mía)
-A donde se habrán ido
Una señora gorda de edad madura entró en pánico y con los
ojos desorbitados, empezó a gritar:
-Nos van a comer, se parecen a las arañas-mientras lloraba y
gritaba sin poder controlarse, presa de un pánico inimaginable.
Entonces un italiano que venía como pasajero, comenzó a hablar:
-Tranquilos, que marcianos ni que marcianos, esos son los
alemanes.
Todo el mundo se quedó mudo y
lo miró
-Durante la guerra mi cuñado trabajó en una fábrica de los
alemanes, que estaba dentro de una
montaña, en la profundidad, que desde afuera no se podía visibilizar. En esa
fábrica los alemanes estaban probando un avión redondo sin alas y que no
consumía gasolina, era totalmente silencioso y que además despegaba verticalmente;
cuando se acercaban las tropas de los aliados, los alemanes desmontaron todo y
lo que no podían llevarse lo destruyeron todo, desapareció todo el personal que
allí trabajaba y mi cuñado se escapó porque un bombardeo hizo reventar las
instalaciones por lo cual pudo escapar corriendo y no paró hasta llegar a su casa. Esos son
los Platillo voladores. Son los alemanes.
Se armó una discusión y a mí se me quitó el sueño, me quedé
mirando el horizonte, por si los tíos estos aparecían de nuevo.
No hice mucho caso a
todo el asunto y pensé que todo era consecuencia de las borracheras que todos
los pasajeros se daban durante todo el día, o el efecto de andar con las tales
damas de compañía que pululaban por la cubierta.
De ese episodio pasaron muchos años, hasta que llegó a Lima una colección sobre la segunda guerra mundial, La Colección San Martin, de la
cual guardo varios ejemplares en mi biblioteca, y en cada volumen traía un tema de interés: unos trataban de los
chinditas, las fuerzas especiales que
usaron los ingleses en la indochina y que fracasaron en el enfrentamiento con
los japoneses, otro número trataba de la divisiones Panzer, otra titulada Armas
Secretas Aliadas, tales como la bomba atómica y la penicilina, que fue ocultada
para que los miembros del eje no pudieran curar sus infecciones y Fleming, su
descubridor, se prestó para ello.
Otro número fue el otro titulado Armas Secretas Alemanas escrita
por el miembro de inteligencia inglés, científico y escritor,
Bryan Ford, que en la primera página del
primer capítulo de su libro hace referencia a los platillos voladores de los
alemanes, en otras palabras el italiano del barco había dicho la verdad.
Pero no es el único Juan Miguel Romaña en su libro “Armas Secretas
de Hitler”, dedica varios capítulos a partir de la página 359 al tema de los platillos voladores,
haciendo mención incluso a los modelos Haunebu l Haunebu ll, Haunebu lll, en
otras palabras el italiano del barco no solo dijo la verdad, sino que esta
verdad está documentada.
¿Cuál es la conclusión?..
La conclusión es: si quieren saber la verdad, pregúnteles a
los alemanes.
Para mi estos objetos no son nuevos, y son de origen
terrestre, además que quienes los maneja deben de ser muy poderosos además de
muy inteligentes, y en algún momento cuando ellos quieran, se darán a conocer.
En el fondo el cuento del marciano no es otra cosa que un
psicosocial de la CIA, para cojudear a las masas, mientras la agresión
imperialista continúa. Lo mismo sucedió con el cuento de las momias
extraterrestres de Paracas, lo cual es el colmo del cinismo de los
psicosociales de la CIA, en aplicación de la llamada psicología oscura.
No debemos de olvidar
que la embajadora de los Estados Unidos en el Perú, Lisa Kenna, durante
9 años fue una alto oficial de la CIA y
por consiguiente ha estado detrás del psicosocial de las momias marcianas.
Mientras la Dina Asesina mataba a 70, y los peruanos se
morían de hambre, las masas de peruanos cojudos con todo el tinglado de la
prensa concentrada se asombraban del hallazgo de los tales marcianos muertos,
lo que demuestra las consecuencias de que todos los años el Perú ocupa los
ULTIMOS LUGARES DEL MUNDO EN EDUCACION Y EN EL COEFICIENTE DE INTELIGENCIA
SEGÚN EL INFOME PISA.
Ahora resulta que los peruanos no solo creen en los pistacos,
el tunche, la llorona, las lagunas de las Huaringas, el fujimorismo, el APRA,
sino también en las momias marcianas. Que pena, que pena carajo.
Que tal desgracia y que vergüenza carajo, hacemos el ridículo
internacional, mientras la Boluarte y el Otarola se matan de la risa, y la misma
Lisa Kenna se debe de estar revolcando de la risa.
2.-¿Y cual es el segundo de los episodios que tuve con este
tema?.
Como nadie me va a creer, mejor no digo nada y los dejo con
la curiosidad.
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